Escribí un post hace justo 3 años coincidiendo con el nacimiento de mi sobrina Helena,y ahora que la historia se repite (pues acaba de llegar mi segunda reina Leire), me gusta dedicar mis letras a ELLAS. A todas. A mis superwoman favoritas:
las mamis. A las que ya han estrenado bebé y a las que aún lo están "fabricando". Todas mamis ya, porque soy de la opinión que una ya lo es desde que toma la determinación de reproducirse y lo hace.
Tres años después el mundo gira igual, seguimos pariendo igual (por desgracia), pero todo evoluciona (por suerte) Y mis ojos lo ven con otra perspectiva. Tres años más de experiencia, de conocimientos, de estudios y de práctica. Y lo mejor, tres años de compartir con vosotras ese proceso del durante y del después. Y de compartir también experiencias con muchas profesionales que como yo nos dedicamos al cuidado de la MUJER. Del disfrute de nuestro cuerpo, de conocerlo, de cuidarlo y mimarlo más allá de lo que nos viene impuesto que es poco más que meras incubadoras humanas. Continente del único ser importante en todo esto... NOOOOOO!!! Bueno, también. Somos madres, pero ante todo MUJERES. Y para cuidar del nuevo ser humano debemos cuidarnos nosotras.
Para conocernos y hablar sin tabues encontré hace poquito un blog que me tiene enamorada por su visión, por su perspectiva y por su amor hacia nosotras MUJERES, que afronta con
naturalidad y rigurosidad el cuerpo femenino y sus ciclos. Os animo a que echeis un vistazo a
El camino rubí.
Y volviendo a mis guerreras multitask. He de decir que lo que más me llama la atención de este último trienio es la falta de término medio que gastan, que podemos achacar a la coctelera química que tenemos dentro en esos meses, pero no siempre tienen culpa las hormonas...
Ahora voy a explicarme.
Lo primero el título. No chiflé todavía pero me encantan los juegos de palabras. Y este en cuestión va a colación de dos consejitos que vamos a daros dos personas que aman y viven su profesión y ven cada día cosas que no siempre nos parecen las más acertadas.
Desde la más profunda humildad y siempre dejando claro que son NUESTRAS OPINIONES y que aunque basadas en nuestra profesión y experiencia son consejos y nunca obligaciones. Cada uno es consciente y libre de hacer lo que le de la real gana.
Una vez aclarado esto vamos al lío.
Siempre he dicho y me reafirmo en que estar embarazada no es sinónimo de ser débil, ni frágil ni mucho menos enferma. No tenemos que de repente comportarnos como si fuesemos de cristal o vivir con eterno cuidado y miedo.
Cierto es que hay que ser precavida, pero no más de lo necesario ni de lo que dicta el sentido común. Pero al igual que no debemos ser muñecas de porcelana tampoco tenemos que ir de espartanas por la vida ni intentar demostrar que nada se nos pone por delante.
Me asusta pasear por el gimnasio y ver a barriguitas haciendo pesas a lo loco (y la mayor parte de las veces sin preguntar ni asesorarse), colándose en clases colectivas y lo peor: recién paridas haciendo abdominales como locas para perder la barriga!!!!!! dios mío!!!! Entre vivir tirada en el sofá y la legión hay un término medio chicas...
"Ni tanto ni tan calvo"
El embarazo es un viaje precioso, tremendamente sensorial y único, en el que debemos ser conscientes de nuestros límites, conocer nuestro cuerpo y los cambios que en él se van produciendo, dejarnos mimar y asesorar y sobre todo DISFRUTAR.
Si tienes dudas lee y pregunta. Y
haz las cosas con cabeza.
En estos tiempos que corren pasamos de un extremo al otro sin tocar el medio. Nos obsesionamos con el culto al cuerpo y la mayor parte de las veces nos saltamos lo saludable en favor de lo estético. Y si eso en condiciones normales es malo, cuando llevamos otro ser humano dentro, con todo lo que ello conlleva PEOR!!
Nuestro cuerpo cambia y debemos
adaptarnos a esos cambios. Debemos tener claro también no sólo donde están nuestros límites, si no donde estaban antes. Es decir, no cambies tus rutinas drasticamente; si ya hacías deporte sigue haciendolo pero adaptando, y si no lo hacías no empieces de golpe. Tan malo es una cosa como la otra.
Os voy a recordar las pautas generales que debeis seguir durante este camino, siempre
suponiendo que teneis un embarazo normal, sin complicaciones ni otras indicaciones específicas del médico especialista:
Para todas...
1. HIDRATATE!!!! es importante que bebas siempre!!! da unos traguitos a intervalos constantes aunque no tengas sed. Esto es vital para controlarnos la temperatura, ya que ésta no debe dispararse. Lleva ropa adecuada y cómoda y evita ambientes muy calurosos.
2. CONTROLA TU CORAZÓN. Debes ser consciente que tenemos unos límites y que no hay que sobrepasarlos. Para ello es importante que te controles las pulsaciones y uses siempre pulsómetro si tienes pensado hacer ejercicio físico o lo realizas generalmente.
3. CUIDA TU SUELO PÉLVICO!!!! Esto sería generalizable a todas las mujeres del mundo aunque no tuvieran barriga, pero durante el embarazo más!!! Esta parte de nuestra anatomía es vital y tenerla correctamente preparada y cuidada nos dará calidad de vida en todos los aspectos. Así que olvida los abdominales
tradicionales y cualquier tipo de
impacto.
Para conocer más de esta parte pincha en este enlace:
suelo pélvico
4. PRACTICA ACTIVIDADES SALUDABLES. Si te decides a hacer ejercicio busca aquellas que te reporten
beneficios (siempre en función de tu experiencia deportiva), es decir, que te hagan la vida más fácil, ayuden a tu cuerpo a mantenerse activo y móvil y que no te lesionen ni te supongan un sobre esfuerzo.
Siguiendo todas estas pautas hay una actividad que gana a las demás por goleada. Que cuida tu cuerpo y mente y te reporta sólo cosas buenas. Me refiero al YOGA. En todas sus vertientes. Pero aqui hoy voy a hablaros especificamente de una: YOGA EN COLUMPIO. Un ejercicio que mi querida amiga Nani Montero conoce bien. así que será ella la que os lo explique:
Vero: Hola Nani!! Qué alegría como amiga y profesional poder contar contigo para este post. Cuentanos para los que no te conozcan un poquito de ti.
Nani: El deporte siempre ha sido mi vida, mi pasión; y desde hace 18 años también es mi trabajo. Desde niña corrí al agua sin miedo, conocí la danza y me enamoré de la música y el baile... Descubrí bien temprano que lo mío era el "arte en movimiento". Y ya ves, con casi 38 años que tengo sigo formandome y disfrutando de mi vocación.
Empecé con el fitness, el baile y el pilates, hasta que a mis 22 añitos descubrí mi segunda pasión que es el Yoga. Fue un regalo para mi, una joya con la que me sentí identificada desde el primer momento. Me enamoré de por vida y sigo aprendiendo. Además tengo la satisfacción de poder transmitir a la gente todos estos beneficios y experiencia.
V: ¿Qué beneficios aporta esta
disciplina a las embarazadas?
N: A
través del yoga con columpio las mujeres embarazadas desarrollan una mayor
conexión con su bebé y consciencia de su cuerpo-mente; el columpio ayuda a la
preparación del parto trabajando la musculatura del suelo pélvico, tomando
consciencia a la correcta respiración, y alivio y descanso de las zonas del
cuerpo que precisan de relajar liberando
cualquier tensión
Diferenciando cada estado de gestación de cada mujer y estudio
médico, aplicaremos la práctica adecuada siempre respetando el ritmo biológico
de cada mujer. El columpio es un excelente soporte direccional que hace de su
práctica una gran labor de autoconocimiento, desarrollo físico y mental para la
madre y su futuro bebé..
V: ¿Cómo funciona y qué beneficios
tiene el columpio?
N: Al descargar la pelvis, la parte superior del cuerpo, tendrá una mayor
disponibilidad y mayor libertad de movimientos.
Se trata de las mismas posiciones que de pie, algunas de ellas
con modificaciones, pero con la ventaja que el columpio sostiene brazos y
tronco. Descargar el peso de la caja torácica, lo que tiene como efecto una
pelvis y un útero más liviano. El sacro se libera del peso del tronco y es
traccionado por los músculos de la espalda. Esta descompresión general del peso
de las vísceras y del bebé favorece al suelo pélvico, lo relaja, le da un
descanso.
V: ¿Por qué esta técnica es útil
también para la cabeza?
N:
Muchas mujeres se enfrentan al
parto con miedo. Lo más habitual es el miedo al dolor y al sufrimiento. Un
miedo provocado por las historias y creencias que nos vienen contando desde la
experiencia de esas mujeres que han vivido partos duros y traumáticos, sin
embargo esto no se debe a que el parto sea intrínsecamente algo muy difícil y
peligroso, sino que en gran medida son el resultado de una mala praxis, es
decir, una atención inadecuada por parte de los profesionales. Es necesario
cambiar esta imagen social. Parir puede ser una experiencia bonita y placentera
siempre y cuando las condiciones sean las adecuadas y saber esto ayudará a
poder parir sin miedo.
V: Hablando de esto, hace poco leí una frase preciosa de una matrona que
decía: “El parto es un acto que la naturaleza ha venido haciendo de manera
espontánea durante millones de años. Un acto programado y dirigido durante
millones de años por una fuerza que está más allá de la comprensión humana, y
es ilógico que la mujer no sepa lo que
es el parto, que lo tema y lo padezca como una enfermedad…”
¿Cómo afecta el miedo al parto?
N: El miedo al parto puede provocar problemas significativos durante el
parto y el postparto, está asociado con un mayor dolor durante el proceso. Una
prolongación del primer y segundo periodo del parto y un mayor sentimiento de
insatisfación, (generalmente la anestesia epidural es solicitada y utilizada por
mujeres con miedo). El miedo en el parto se ha demostrado que está implicado en
el 7-22% de las cesáreas electivas por parte de la madre, sin justificación
médica, lo que aumenta la tasa de cesáreas. El grupo de Ryding y colaboradores
encontrò a su vez que el miedo severo puede causar que el parto desemboque en
una cesárea de emergencia.
No solo el temor, sino la ansiedad y el estrés durante el parto aumentan el
nivel de adrenalina y disminuyen las contracciones uterinas, además prolonga la
duración del parto y empeora el estado fetal. Es más, el simple hecho de entrar
en el hospital puede afectar notablemente a las contracciones uterinas como
consecuencia de cambio de escenario.
Para vencer el miedo al parto es muy necesario conocer a fondo el proceso de
pre y post parto en toda su dimensión, no solo desde el punto de vista
fisiológico sino también desde el punto de vista de "saber". Así mismo, una atención personalizada o en grupo reducido instruida por un profesional que
aplique una correcta praxis bajo un estudio exhaustivo de cada mujer y o
conjunto de mujeres.
V: ¿Tiene contraindicaciones el
columpio?
N: Durante
el embarazo la anteversión y la lordosis aumentan como consecuencia del peso
del bebé que desplaza el abdomen hacia adelante, no hay que alarmarse pero si
estar muy atentos si estos cambios posturales conllevan molestias o dolores
locales.
V: Volviendo al columpio. ¿Qué te ha
aportado como profesional esta práctica?
N: Mi experiencia profesional a través del yoga y yoga aéreo me ayudó no
sólo a conocer mejor el cuerpo de la embarazada sino también a entender y
aplicar una correcta praxis. Cada mujer es un mundo y el mundo habita en cada
mujer... Lo que si es obvio es que el conocimiento ayuda a la acción
Con el paso del tiempo comprendí que no debemos crear
controversia en cuanto a métodos, es decir, la receta mágica no existe...lo que
existe es saber qué es lo más adecuado para cada mujer, precauciones, cuidados,
yoga, yoga aéreo, gimnasia hipopresiva...
Todo ayuda si se aplica correctamente y en su momento preciso y
adecuado... Y sobre todo "Coherencia" para acercarnos a la certeza de
que sabemos nuestra faceta en este mundo como mujeres.
V: Por último Nani. ¿Qué opinas sobre el enfoque que tenemos actualmente entre deporte y embarazo?
N: A día de hoy se ha mejorado en cuanto a información y medios pero aún queda mucho por esclarecer y conocer. Vuelvo al miedo, puede que debido a creencias o a la influencia de la opinión o del entorno...
Yo creo que lo importante es vivir nuestra propia experiencia y llevar una buena praxis ditigida por profesionales y sobre todo escuchar nuestro propio cuerpo.
Tras el parto mas de lo mismo. Cuidado, respeto y asesoramiento. Respetar la cuarentena, los cambios hormonales, físicos y emocionales, descansar... Recuperarnos sin estrés, sin ansiedad, sin prisa. el cuerpo es sabio.
Empezar como acabaste, con yoga. Recuperar el suelo pélvico con hipopresivos... siempre de la mano de un profesional y disfrutando de la gran felicidad de ser mamá.
NAMASTE
GRACIAS NANI
Soy novata. Acabo de quedarme embarazada pero quiero moverme...
Como decía arriba, cambiar las costumbres no es acertado, pero es normal que quieras cuidarte y moverte un poco, asi que manos a la obra!!!
Es importante que por muchas ganas que tengas empieces con calma. El trabajo de cardio (caminar o eliptica) es perfecto ya que puedes modular fácilmente la intensidad y es un ejercicio sencillo y saludable. Y si te apetece hacer alguna actividad decantate por aquellas que no sean extenuantes, que cumplan a rajatabla los 3 primeros puntos arriba explicados y sobre todo que puedas controlar y disfrutes. Para ello CONSULTA y ASESÓRATE de cuales son las más adecuadas.
La piscina es maravillosa y el yoga como habrás podido leer más arriba perfecto. Cada vez más centros disponen de actividades específicas para vosotras, como el Pilates. Pero
asegurate que sea
específico para embarazadas!!!!
La evolución del entrenamiento irá en función del trimestre gestacional. Según vaya avanzando debes bajar la intensidad de trabajo, de cargas y de clases.
Soy deportista habitual...
En el caso de que seas una de las arriba mentada espartana (o no tanto), y a pesar de que os animo a hacer ejercicio, debemos ser conscientes. Y aunque la energía nos permita seguir con nuestras rutinas debemos ser estrictas con los 3 primeros puntos escritos más arriba. ESTRICTAS!
Para todo lo demás (en general) podremos sin mucho problema mantener el ritmo de entrenamiento que teníamos. Al menos hasta el segundo trimestre.
En función del avance de la barriga debemos ir bajando la intensidad del ejercicio paulatinamente. Si haces fitness rebaja cargas, si haces clases olvida las más intensas y si haces cardio vigila pulsaciones y baja volumen. Se trata de estar bien, de estar saludable y de que los desperfectos del post sean lo menores posibles y para ello la opción más inteligente es la PREVENCIÓN.
Y QUÉ HAGO DESPUÉS????
Esta parte es fundamental para tu recuperación.
NO TENGAS PRISA!!!!!
Tu cuerpo debe volver poco a poco a su sitio y correr no ayuda.
Has tardado 9 meses en crear una vida y en esos meses tu cuerpo ha sufrido cambios físicos y fisiológicos que deben recuperarse a su tiempo. Al igual que has ido bajando intensidad con el avance de la barriga ahora debemos recorrer el camino a la inversa e ir gradualmente aumentando nuestra actividad.
NO hagas ejercicio durante la cuarentena ni ningun tipo de esfuerzo
NO hagas ejercicio físico normal hasta al menos dos meses del parto
NO hagas abdominales para bajar la tripa ni para endurecerla porque LOS ABDOMINALES NO BAJAN LA BARRIGA!!!! SOLO CONSEGUIRÁS DARLO MÁS DE SI, ESTROPEAR TU SUELO PÉLVICO E INCLUSO ERNIARTE. Y SI SUFRES DE DIÁSTASIS LA ABRIRÁS MÁS.
NO utilices cargas hasta pasados unos meses ni hagas clases intensas.
No os imaginais cuantas mamis vienen despues de meses quejándose de que la tripa no desaparece, de que la diastasis no mejora (muchas veces es al revés) y de que el tono abdominal es bajo o inexistente.
Para recuperarte empieza suave, sin impactos ni esfuerzos. Haz cardio suave, piscina, hipopresivos, yoga...
Cuidate y mimate. Y sobre todo recalco: no tengas prisa. Date tiempo. Disfruta la maternidad.
Asesórate por tu médico, matrona, fisioterapeuta y entrenador. Busca terapias o técnicas que trabajen y recuperen tu suelo pélvico y faja abdominal para que vuelva a ser competente y haga su función (para ello sobra decir que lo más indicado es la gimnasia hipopresiva)
Sobre todo y por encima de todo porque de esta manera evitarás problemas mayores en el futuro.
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¡¡¡SED FELICES!!!!
(mi sobrina Leyre) |
